Las cifras astronómicas que se mueven alrededor de la liga de fútbol de primera división en nuestro país no son sino un reflejo real del dinero que se mueve en torno al fútbol. En la élite de este deporte todo parece desmesurado y por supuesto los seguros para los futbolistas también.
No estamos hablando de las acciones personales de aseguramiento, aquellas en las que el propio deportista decide asegurar, por ejemplo sus piernas. Sino del coste que puede suponer para un club de fútbol mantener aseguradas a sus estrellas ya que, el precio del aseguramiento desde luego no es igual para todos los futbolistas.
Seguros y deportes
Blindar con coberturas a las estrellas deportivas se ha convertido en una práctica totalmente normalizada. A nadie le sorprende que se aseguren (como dicen) los pulgares de Fernando Alonso por 10 millones de euros o en su momento el seguro de piernas, rostro y torso de David Beckham por casi 150 millones de euros. Sin embargo y curiosidades aparte, es cierto que un club de fútbol, desde el punto de vista económico, necesita dar cobertura a sus futbolistas ante lo que supondría por ejemplo una lesión que les imposibilitara seguir en activo.
Esto se ha ido haciendo especialmente relevante a medida que los costes de los fichajes se iban volviendo astronómicos. Y es comprensible, una inversión multimillonaria en un futbolista, se quiera o no, acaba convirtiendo a la persona en bien y como tal es necesario protegerlo y asegurarlo.
Cómo se calculan estos seguros
Obviamente en los casos en los que nos centramos, aquellos fichajes costosos de relumbron, los costes se disparar y alejan este seguro de la media habitual de los seguros deportivos, aunque, de base, se trata exactamente de eso, de seguros deportivos con clausulas particulares.
Al margen de las coberturas particulares se da por entendido que la cobertura principal equivale al coste de la inversión en el jugador; es decir, si un jugador ha costado 100 millones de euros su cobertura inicial sería esa y el coste se establecería proporcionalmente a la cobertura. De hecho no será extraño que en la operación intervengan más de una aseguradora. A partir de este concepto pueden existir variaciones decrecientes o creciente; decrecientes si se considera que el jugador va amortizando su coste y disminuyendo su valor de mercado y crecientes en la otra dirección.
En líneas generales y desprovistos de los costes añadidos de las condiciones particulares se puede dar por bueno un calculo medio muy general que nos dice que el coste de estos seguros pueden rondar entre el 1% y el 1.5% de lo que cubre. Esto nos vuelve a situar en un escenario en el que un seguro de 100 millones puede situarse entre 1 y 1.5 millones de euros anuales…por un solo jugador.
Teóricamente si quisiéramos calcular el coste de aseguramiento de una plantilla al completo debiéramos sumar el valor individual de sus jugadores y aplicar la anterior formula, sin embargo, esto no es exacto del todo ya que las primas de los seguros aumentan en volumen en relación al total de la cobertura es cierto, pero pueden influir otros factores.
Otras cuestiones
Si bien, sobre todo en el caso de las estrellas del fútbol se da como bueno el valor de traspaso como punto de partida para el calculo de las coberturas (y de las primas de las pólizas) en ocasiones este valor de traspaso puede chocar con la consideración del valor de mercado, algo que, como sabemos, en el fútbol es muy relativo. Esta cuestión podrá modificar tanto la cobertura como la prima en una u otra dirección; un traspaso de 50 millones dos temporadas atrás y una valoración de mercado de 75 millones tras una temporada excepcional pueden perfectamente modificar la cobertura inicial asociado a las 50 millones.
Por supuesto la edad y la duración del contrato son elementos que pueden influir en el coste final del aseguramiento, un concepto que anualmente se lleva buenas cantidades en todos los clubs pero que, en el caso de los equipos con figuras internacionales en sus filas se tornan cantidades millonarias.
