La crisis está haciendo incrementar dentro del sector de seguros los intentos de fraude a aseguradoras. Es por ello que las compañías aseguradoras investigan un 3% de los siniestros producidos debido a que sospechan de irregularidades.
Se conoce la cifra que indica que, existe una simulación irregular de daños personales y que llega a 25.000€.
Si bien los intentos de fraude no son nada nuevo, el potencial aumento se lo atribuyen a la crisis. Las aseguradoras han registrado un aumento del 20% en las reclamaciones de siniestros fraudulentas, donde más se a notado ha sido en daños personales en el seguro del automóvil y en robos en el seguro del hogar y de comercios o pequeñas empresas.
Desde ICEA, señalan que el 3% de los siniestros que han sido presentados presentan hechos fraudulentos, como: El inflar el valor de daños reclamados, simulación del siniestro o incluso causarlo, modificar los hechos al contarlo para poder resarcirse por daños que se encuentren excluidos de la cobertura de la póliza.
Un 77% de los fraudes se presentan en el seguro de automóviles; el 12%, dentro del seguro del hogar, y el 3%, en seguros de comunidades.
El departamento de fraudes de Axa, denuncia que este departamento vio incrementarse un 35% los siniestros fraudulentos que han sido detectados y elevado un 20% en casos que logró demostrar finalmente el fraude, pudiendo generar un ahorro durante 2009 de 50 millones de euros.
Asimismo desde el área jurídica de Fiatc, señalan que esta mutua detecto 15% más de siniestros fraudulentos durante 2009. Tanto Axa o Fiatc, y demás compañías investigan también siniestros de poco importe.
El grupo investigador de riesgos Grupo Paradell, señala que se ha elevado un 23,5% los fraudes detectados en el sector asegurador. Dentro de esto, lo que más han detectado es la exageración del daño en robos, mientras que en entre los particulares, cuando ha habido un robo en una casa, declaran sus habitantes tenían relojes Rolex y televisores de plasma. Por el lado de las empresas que están en crisis, se han detectado robos simulados para desaparecer stocks a los que no pueden darle salida o máquinas viejas que no pueden utilizar.
Dentro de todos estos fraudes, a la mayoría se los detecta durante el proceso normal de revisión de los pagos, ya que son los peritos de las compañías y los tramitadores de siniestros los que detectan la mitad de los fraudes en el seguro del automóvil y en el ramo de diversos, los médicos son los que detectan el 60% en los casos en seguros personales: vida, enfermedad, accidentes y un tercio en automóviles.
ICEA, señala que por cada euro que es invertido para investigar el fraude, termina generando un ahorro de 37€ en indemnizaciones no pagadas. De manera que en daños personales, las reclamaciones fraudulentas registran un importe medio de 23.000€ en accidentes de automóviles, y en responsabilidad civil, de 24.000€.
Mientras que, las reclamaciones fraudulentas más usuales son las de daños materiales en el seguro del automóvil, con un importe medio de1.800€.
De esta manera, las aseguradoras dejan de abonar las reclamaciones que saben fraudulentas, pero finalmente en un 16% de los casos el asegurado lo reconoce, y en muchos de los casos el asegurado suele recurrir a los tribunales por incumplimiento del contrato.