Mucho se habla de la siniestralidad al conducir y de los factores climatológicos, pero también existen otros factores a mejorar, como son la iluminación en los coches, al mejorar ciertos elementos como los focos se puede evitar cierto grado de probabilidad de una siniestrabilidad.
Según un estudio, los conductores que cuentan con iluminación de xenón en sus vehículos pueden viajar en un 70% más seguro que los que suelen utilizar luces halógenas convencionales, así lo señala un estudio del Club Automovilístico Alemán (ADAC).
Las pruebas de iluminación internacionales realizadas, de utilizar todos los vehículos faros de xenón, el número de accidentes de tráfico en horario nocturno se llegaría a reducir a la mitad, a la vez que la cifra de víctimas mortales se reduciría hasta en un 18%.
Dicho estudio refleja que, los faros de xenón ofrecen una capacidad lumínica entre 2 y 3 veces superior a la iluminación tradicional, garantizando un mayor alcance al iluminar la carretera, aportando una mejor visibilidad lateral.