Cuando contratamos prácticamente cualquier póliza de seguro, a pesar de que no nos informamos todo lo que debiéramos de sus prestaciones, coberturas y condiciones, es cierto que prestamos una atención relativamente importante a todos esos detalles. Sin embargo existen un buen número de seguros asociados a productos financieros que en muchas ocasiones, no sólo no conocemos bien, sino que incluso desconocemos los posibles beneficios y coberturas que nos pueden aportar.
Esta situación puede llevar perfectamente a una duplicidad entre seguros innecesaria, e incluso a costes por encima de los que realmente debiéramos asumir.
Uno de los grupos de seguros más desconocidos dentro de los asociados a productos financieros son los seguros de las tarjetas de crédito. El usuario suele dar por bueno el hecho de que su tarjeta posee algún seguro asociado, pero sin embargo en pocas ocasiones se molesta en conocer la envergadura de sus coberturas y la funcionalidad real de dichos seguros
¿Qué tener en cuenta al contratar un seguro?
A pesar de que existen muchas variantes y posibilidades estos serían los seguros más habituales asociados a las tarjetas de crédito.
Seguros de vida: los más comunes y extendidos prácticamente presentes en todas las tarjetas.
Seguros de robo: uno de los seguros más importantes cara a las malas prácticas con nuestras tarjetas.
Seguros antifraude: en la línea de los anteriores y un seguro muy interesante sobre todo para aquellas personas que utilizan mucho la tarjeta para pagos.
Seguros de viaje: Otro de los clásicos de las tarjetas de crédito relacionado con los retrasos y las cancelaciones en vuelos por ejemplo.
Seguros de accidente en viaje: Con coberturas que pueden incluir hospitalización en el extranjero, traslados y gastos hospitalarios.
Seguros de protección de compra: aunque menos comunes que los anteriores cada vez ganando mayor presencia dentro de los seguros asociados a las tarjetas de crédito.
